Vance Joy: Nation of two

2/11/2018

Llevaba muchos meses esperando a que llegara este día, por fin iba a ver a otro de mis artistas favoritos, Vance Joy. Desde que conseguí la entrada para su concierto no había hecho mas que contar los días y meses que faltaban para poder verle. El concierto fue en la sala Paradiso en Amsterdam, un lugar que me dejó alucinada de lo acogedor y bonito que era. Nada más entrar, fui a la pista para ver si había mucha gente y podía ponerme en primera fila para poder ver a Vance Joy desde cerca, pero, al ver que el escenario era mucho más alto que yo, me dirigí hacia la zona del balcón, donde tenía las mejores vistas de todo lugar, además podía disfrutar del concierto sentada y como no, con una buena cerveza. 

Empezó el telonero, Scott Helman, el cual, no conocía de nada. No sabía quien era ni había escuchado ninguna de sus canciones antes. Me sorprendió muchísimo, la forma en la que se desenvolvía en el escenario, su forma de cantar, lo mucho que transmitía al público y lo más importante, hizo que la gente que se encontraba en la sala se lo pasara genial con él. Además, canto varias canciones que acabaron gustándome muchísimo. Sin duda un gran artista que supo como conectar con la gente y transmitir toda su energía y todas sus emociones. 

Llegó el turno de Vance Joy, se retrasó media hora y esa espera se hizo eterna. De pronto, aparece y empieza a cantar el primer tema, en medio del escenario, con un foco blanco que apuntaba directamente hacia él y en el que solo se veía iluminada su silueta, una forma espectacular de empezar. En el siguiente tema ya pusieron las luces normales y todo el mundo empezó a aclamarle en cuanto le vieron. Su voz te enganchaba de principio a fin, te hipnotizaba, sonaba incluso mejor en directo, estaba totalmente enamorada. Canto todos los temas de su nuevo disco Nation of Two y entre canción y canción contaba la historia de cada una de ellas. Me pareció tan cercano con el público, ya que en cierto modo, te sentías identificado con sus historias, como también con sus canciones.

Acabó el concierto cantando su canción más conocida, Riptide, la gente se volvió loca cantándola a pleno pulmón y fue un momento impresionante, pero a su vez algo triste, ya que su actuación había llegado a su fin. Fue sin duda uno de los mejores conciertos a los que he podido asistir. Nunca había vivido de tal forma la música en directo y nunca me lo había pasado así de bien. 

Pictures by Brad Cauchy