¡Volvemos a Ibiza!

22/08/2017

Quien me iba a decir hace un mes, que acabaría volviendo a la isla bonita tan pronto... Unas horas antes, estaba volviendo de decibel y en menos de 12 horas estaba en el aeropuerto otra vez poniendo rumbo a Ibiza. 

Tras todo lo ocurrido la vez anterior en Ibiza, no me esperaba para nada que esta vez fuese a ser igual pero... LO FUE, de hecho, se superó. Estaba totalmente preparada para pasar 15 días en el paraíso, en el lugar donde mi mayor sueño se hizo realidad. Casi sin dormir y con un dolor en todo el cuerpo por el festival, me puse en camino de Ibiza a disfrutar de unas fantásticas vacaciones. 

Aunque sonara muy repetitivo, los días allí eran increíbles: por la mañana ir a la playa, por la tarde a algún Beachclub y por la noche Ushuaia o Hï. Todos los días eran alucinantes, nada podía hacer que eso cambiara. Incluso estando mala con fiebre, disfruté en las mejores fiestas de Ibiza y viendo a los mejores djs. La verdad que no podía ser más feliz, ya que había muchos djs que nunca había visto y que tenía ganas de ver en directo, allí lo conseguí. 

Después de muchas fiestas y muchos momentos, llegó el último día en la isla, era la despedida y por tanto, esa tarde/noche tenía que ser épica. Para variar y por suerte, pinchaba Martin Garrix en Ushuaia, que mejor manera de repetir la despedida de la última vez. Tras su actuación, fuimos al after que se celebraba en los camerinos de la discoteca. Estaba Garrix junto con todos los djs que se encontraban en la fiesta, ya fuese trabajando o disfrutando. No me lo podía creer, ¡estaba por segunda vez de fiesta con mi ídolo! Después del after, pusimos rumbo a Hï, esa noche había fiesta de Techno y a pesar de que no era muy fan de ese estilo musical, me lo pasé como nunca, disfruté de cada minuto y la verdad, descubrí un mundo nuevo en cuanto a ese género musical. 

Podría escribir todas y cada una de las cosas que sucedieron en ese viaje, pero para ello me podría tirar años escribiendo. Tocaba volver a Madrid y aunque me daba pena dejar la isla, estaba feliz, en una semana tocaba viajar de nuevo, pero esta vez, a Alemania, el festival Q-base me esperaba...